top of page
Canasta1-2020.png

HEREDEROS DE BENDICIÓN

  • Foto del escritor: Pr. Herman Gajardo Pastén
    Pr. Herman Gajardo Pastén
  • 9 sept 2024
  • 1 Min. de lectura

“9. no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.”

1 Pedro 3:9


En este versículo que leemos hoy, el apóstol Pedro sigue aconsejándonos y animándonos a cumplir con todo lo que Dios demanda de nosotros. La primera frase nos dice: “no devolviendo mal por mal”, y no lo escribe como una opción ni lo escribe con alternativas o condiciones , es simplemente tajante, es una orden, un mandato, algo que tiene que fluir en nosotros, pues ya no somos nosotros, es Cristo en nosotros, por lo cual, esto no amerita el discernirlo, o pensarlo bien, solo ser obedientes a sus preceptos. Luego agrega: “ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo”, al respecto debemos recordar lo que el apóstol Pablo escribió en su carta a la iglesia en Roma: “Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis”, o sea, no importando las circunstancias adversas a las que nos enfrentemos, debemos siempre bendecir, hablar bien de los demás.


El versículo continúa diciéndonos: “sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición”, dice sabiendo, o sea, Pedro da como sabido lo que tenemos que hacer, y enfatiza que Dios nos llamó y nos apartó, para que fuésemos herederos de bendición, y esa bendición solo la podremos alcanzar negándonos a nosotros mismos, a nuestros impulsos pecaminosos, a nuestra antigua vida, y dejar que Dios dirija nuestro andar.


Pr. Herman Gajardo P.


Comments


bottom of page